Situado en el corazón de un encantador pueblo con aparcamiento cercano. Habitaciones tranquilas y decoradas con sobriedad. Personal amable y atento, que se asegura de tener todo preparado antes de la llegada. Desayuno variado y puntual. Ambiente acogedor y familiar.

Nos alojamos en un hotel que nos recibió como si fuéramos parte de su familia. Las dueñas, dos personas mayores muy amables, nos hicieron sentir como en casa. El hotel está bien ubicado, cerca del centro de Monsanto y ha sido recientemente reformado, por lo que las instalaciones son nuevas y limpias. Definitivamente volvería a alojarme allí en el futuro.

Al llegar al hotel, no había nadie en el establecimiento y tuvimos que llamar varias veces para que nos abrieran. Además, no aceptan pagos con tarjeta, algo que no nos advirtieron previamente.

Nos encantó este alojamiento. Al llegar fuimos muy bien recibidos por el personal, que fue muy atento durante toda nuestra estancia. La habitación era muy bonita y cómoda, con una decoración rural de buen gusto. Además, la ubicación era clave, ya que estaba en una pequeña plaza frente a la iglesia y era fácil de encontrar. También pudimos aparcar sin problemas en la zona.

Hubo algunas cosas que no nos gustaron. Por un lado, solo se podía pagar en efectivo, lo cual nos resultó un poco incómodo en estos tiempos.

Nuestra estancia en Casa Pires Mateus fue realmente agradable. Aunque al llegar no había nadie en el establecimiento, nos atendieron de manera amable y nos dieron la llave de la habitación. La cama era cómoda y las vistas desde la habitación eran magníficas. El entorno del hotel era fabuloso, rodeado de naturaleza. Apreciamos la decoración con paredes de piedra y muebles antiguos de madera en nuestra habitación. El desayuno en el hotel fue variado y delicioso, especialmente porque el pueblo tenía poca oferta gastronómica. El dueño fue muy atento y simpático.

Hubo algunos aspectos que nos decepcionaron. En primer lugar, la habitación olía a tabaco, lo cual fue desagradable.

Nos alojamos en un encantador hotel en un pueblo espectacular. La habitación tenía una hermosa decoración con paredes de piedra y muebles antiguos de madera. El desayuno fue variado y delicioso, perfecto para empezar el día. El dueño del hotel fue muy atento y simpático, nos hizo sentir como en casa. Además, la ubicación del hotel era ideal, cerca de todo lo que queríamos visitar.

El acceso al aparcamiento era un poco complicado, pero se solucionaba fácilmente llevando las maletas hasta el hotel y luego buscando donde dejar el coche en los parkings gratuitos del pueblo.

La ubicación perfecta en el corazón de Monsanto. La casa parecía un hogar, muy acogedora.El personal muy amable y atento.Habitación bien acondicionada y limpia.El desayuno muy completo y delicioso.

Nada, todo estuvo bien.

Casa de piedra bonita y cuidada, bien ubicada, habitación con vistas, cama cómoda.

Nada malo.

Me sorprendió gratamente la ubicación del alojamiento, justo en el corazón del pueblo, lo cual fue muy conveniente para explorar la zona. Además, el lugar estaba impecablemente limpio, tanto la habitación como las zonas comunes, lo cual le dio un buen aspecto al lugar. A pesar de que hacía frío, no tuvimos ningún problema ya que en todas las estancias había aire acondicionado, lo cual fue una gran ventaja. disfruté de la terraza de nuestra habitación, la cual ofrecía unas vistas espectaculares.

Llovió mucho durante nuestra estancia y no llevábamos paraguas. Hubiera sido agradable que nos ofrecieran uno prestado para poder disfrutar mejor del pueblo durante la tarde.

Mi estancia en Casa Pires Mateus fue inolvidable. El personal fue extremadamente amable y atento, siempre preocupado por todas mis necesidades. La ubicación del hostal es perfecta, justo en el centro del pueblo. Además, el desayuno servido en el comedor era delicioso y abundante. Sin duda recomendaría este alojamiento para visitar Monsanto.

Me encantó mi estancia en Casa Pires Mateus. Al llegar, fui recibido con mucha calidez y amabilidad por el sobrino de una de las dueñas y también Edith, una de las dueñas, quien fue muy simpática. Me permitieron elegir la habitación que más me gustara, ya que era el primer huésped en llegar. Las habitaciones eran hermosas, con una decoración rural y buen gusto. A pesar de ser una casa antigua, estaba completamente renovada. La cama era muy cómoda y el baño estaba impecablemente limpio. Al día siguiente, el desayuno me sorprendió por la gran variedad de opciones y lo delicioso que todo estaba. Había café, jugo, pan casero, bizcocho casero, mermelada. La ubicación del alojamiento era perfecta, en una pequeña plaza frente a la iglesia, y era fácil estacionar allí. Además, era fácil de encontrar ya que está en la calle principal de ingreso al pueblo. Me sentí como en casa gracias a la hospitalidad y la buena atención. Sin duda, recomendaría este alojamiento para visitar Monsanto.

La única crítica que puedo hacer es que al llegar, me asignaron una habitación inferior a la que había reservado. Sin embargo, me la dejaron a un precio más barato como compensación.

Nos encantó la amabilidad de la señora encargada, siempre pendiente de nosotros. La habitación era fantástica, con camas súper cómodas y ropa de cama de excelente calidad. Además, el desayuno que nos preparaba la señora era delicioso, con un café y zumo recién hechos y unas tostadas riquísimas. Otro punto a destacar es la limpieza impecable de toda la casa. Sin duda, un lugar que recomendamos al 100% y al que volveremos cuando podamos. Mil gracias por todo.

Lo único que no nos gustó fue el olor a tabaco en la habitación. Por otra parte, el tema del aparcamiento también nos resultó un poco incómodo, ya que tuvimos que llevar nuestras maletas hasta el hotel y luego buscar donde dejar el coche.

El hotel está situado en una ubicación conveniente y fácil de acceder. El desayuno incluido es excelente, con una amplia variedad de opciones. El personal es amable y atento, proporcionando un buen servicio. La habitación y el baño están limpios y bien equipados.

Na.

Nos alojamos en Casa Pires Mateus Hostal y nuestra experiencia fue maravillosa. La habitación estaba bien, la cama era cómoda y acogedora. Además, la ubicación del alojamiento era ideal, sin tener que subir cuestas o escaleras con nuestras maletas. El personal fue excepcionalmente amable y atento, brindándonos un trato increíble. El desayuno fue delicioso y completo, adaptándose a nuestra hora de salida. Además, pudimos disfrutar de una sensación de tranquilidad y desconexión en el lugar.

Nada negativo 😊.

Nos encantó la ubicación del hotel en este hermoso y pintoresco pueblo portugués. La habitación era cómoda y estaba impecablemente limpia, con una amplia cama y un baño espacioso. Además, el desayuno incluido era completo y delicioso.